Lápices 3D, dispositivos holográficos, pizarras digitales, lapiceros inteligentes e impresoras 3D son algunos de los gadgets de arquitectura más innovadores.
Robots aspiradores, impresoras 3D, consolas de videojuegos guiadas por los movimientos del usuario y aplicaciones móviles capaces de hacer mediciones exactas con la cámara de un smartphone. Estas tecnologías tienen algo en común: están relacionadas con el espacio y las dimensiones, dos de las variables más importantes para los arquitectos.
Estos desarrollos tecnológicos son la punta del iceberg de las innovaciones aplicadas a la arquitectura. Lo que sigue es un repaso por los mejores gadgets que revolucionan esta disciplina.
A finales de 2018 volvieron algunas tendencias, como los espacios semiterminados. El diseño de estructuras construidas con impresoras 3D fue otra innovación adoptada por algunas firmas de diseño y arquitectura. Para el 2019 se esperan novedades, algunas introducidas por nuevos actores en la industria, como el millonario Elon Musk y sus ladrillos low cost.
En este artículo daremos un recorrido por las tendencias de diseño de interiores para 2019, con especial énfasis en el diseño de oficinas.
• Lapiceros inteligentes
A simple vista son lapiceros corrientes con acabado de primera, pero realmente son impresionantes dispositivos futuristas: tienen cámara integrada y sensor de movimientos, que graban y digitalizan lo que se traza en el papel.
Tienen conexión por bluetooth que mediante una app transmite lo trazado a una pantalla de TV, tableta, PC o smartphone. Contienen también una memoria para una cantidad casi ilimitada de escritos o dibujos. Algunos modelos son incluso capaces de almacenar audios y de transcribirlos, una característica muy útil para captar pensamientos repentinos y convertirlos en notas. La mayoría de estos lapiceros incluyen una libreta inteligente especial con muchas hojas para hacer tantos bocetos o dibujos como se quiera.
Estos lapiceros son la solución perfecta para los arquitectos que prefieren la tinta y el papel antes que dibujar con herramientas digitales o para los que siempre quieren un respaldo de sus bocetos. En el mercado hay muchos modelos; los más conocidos son N2 Neo Smartpen, Livescribe 3 y NeoLab Convergence M1.
• Digitalizadores de colores
Hay tonos específicos que pueden hacer una gran diferencia en una obra arquitectónica, sobre todo en exteriores. Para los arquitectos que piensan así y tienen una inclinación hacia el diseño de interiores y el juego de colores, esta es una herramienta que deben tener.
“Digitalizador de colores portátil”, así lo define la compañía que creó este artefacto. El concepto es simple: un equipo capaz de escanear cualquier color, sin importar la textura de la superficie, y de almacenarlo para luego descargarlo en Photoshop o en alguna app con una paleta de colores digital a la que se pueda acceder desde un dispositivo Apple.
Es un invento especialmente útil para los arquitectos que creen que en el color está la esencia de sus creaciones y quieren recrear algún tono en específico. El digitalizador Cube, fabricado por Palette, puede captar los colores propios de la naturaleza, por lo que plasmarlos en una obra no será un problema nunca más.
• Lápices 3D
El lápiz de grafito que permite hacer creaciones en 2D es una herramienta tradicional que pone a volar la imaginación. Pero los lápices 3D llegaron para hacer realidad lo que antes solo se podía imaginar. En lugar de dibujar con grafito, estos lápices derriten un plástico especial que se solidifica rápidamente, para así crear estructuras que pueden unirse y dar forma a obras en tres dimensiones.
No es una herramienta exacta: el plástico es muy moldeable y el pulso humano está lejos de ser perfecto, por lo que los bastones u otras figuras que se pueden crear suelen ser irregulares. Sin embargo, sirven perfectamente para materializar un bosquejo, lo que da una idea a escala de cómo podría verse. Quienes ya dominan el arte de estos lápices han sido capaces de replicar la Torre Eiffel, la Estatua de la Libertad y otras reconocidas obras del mundo.
Estos dispositivos funcionan con los mismos principios y materiales que muchas impresoras en 3D, pero el mecanismo se adaptó para otorgar el poder creativo de los lápices y explotar la conexión única de los arquitectos entre las manos y el cerebro. Por ello, este es uno de los gadgets de arquitectura con mayor potencial. Lix, 3D AIO y 3D Doodler Create son los modelos más comerciales.
• Distanciómetros o medidores de distancia láser
Para medir las dimensiones de un espacio, antes era necesario recurrir a la cinta métrica, reclinar la espalda y lidiar con el aluminio de la cinta que se dobla. Todo ha sido distinto desde que los medidores de distancia láser llegaron al mercado.
Estos dispositivos emiten una luz láser que puede alcanzar entre 30 y 80 metros, según el modelo. Incluyen sensores que miden solo cuando se los usa con la inclinación correcta y una calculadora automática que transforma las medidas en cálculos de área. Son muy fáciles de usar: la mayoría solo incluyen un botón y una interfaz digital amigable.
Con un distanciómetro es mucho más sencillo y seguro hacer mediciones en techos, así como conocer el tamaño de un lugar aunque no se tengan los planos. Bosch es la marca que se destaca sobre las demás en esta tecnología.
• Impresoras 3D
Este es uno de los dispositivos para arquitectos más útiles. Las impresoras 3D funcionan con materiales derivados del plástico, que aglomeran o esculpen hasta lograr una forma o maqueta volumétrica.
Para crear una maqueta ahora solo necesitará horas en lugar de semanas: se cargan los datos del objeto en un programa y se escoge una escala. La mayoría de los programas funcionan con fotografías y videos o son compatibles con escáneres 3D, lo que facilita aún más la tarea.
Pero no solo es posible crear maquetas y modelos a escala: esta tecnología ha crecido a pasos agigantados y es factible encontrar casas enteras construidas con impresoras 3D. Esto gracias a que se imprimen diversas secciones con una aleación de plástico y concreto, que luego se juntan para formar estructuras rígidas como paredes y columnas.
Esta invención permite crear también casi cualquier objeto, como muebles, mesas, lámparas o puertas. Este toque de personalización puede ser la debilidad de los arquitectos que prefieren el diseño de interiores.
Puede que algunos no lo consideren un gadget, pero hay versiones tan pequeñas -casi portátiles- que cualquier arquitecto puede tener en su estudio para materializar rápidamente sus planos. Las aplicaciones apenas están descubriéndose. En el emirato de Dubái, por ejemplo, se espera que para 2025 la cuarta parte de las edificaciones sean impresas en 3D.
• Escáneres 3D
Las impresoras 3D y los escáneres 3D son tecnologías distintas, pero complementarias. Los escáneres toman las dimensiones de cualquier elemento o lugar, almacenan los datos en un software especial y crean una réplica digital fiel.
Estos escáneres son especialmente útiles para conseguir impresiones volumétricas en 3D. No obstante, también es la tecnología perfecta para guardar la representación de un espacio que se remodela, una especie de reconstrucción digital que luego puede ser modificada para probar cómo se vería cuando se realizan cambios.
Es una herramienta para realizar tareas creativas o para almacenar datos exactos sobre un espacio u objeto. Eora 3D es uno de los equipos más exitosos, pues se combina con dispositivos Android y los convierte en un verdadero escáner 3D.
• Proyectores holográficos
Usualmente los arquitectos solo comparten los archivos CAD entre sí y muestran a los clientes maquetas o piezas 3D para que se puedan imaginar mejor los espacios. Pero la proyección holográfica está cambiando esto, pues hace posible crear maquetas digitales en tres dimensiones.
Una de las invenciones que promete revolucionar este campo es la de Tribal 3D. Se trata de una lámpara y una pantalla que se combinan para crear “impresiones lenticulares”, hologramas en 2D que pueden manipularse y parecer en 3D según el ángulo desde donde se les vea. Solamente hay luz y una pantalla, sin vidrios, lentes o proyectores costosos.
Por otro lado, SketchUp, el software de modelos en 3D, aún desarrolla una app que funciona en conjunto con los Microsoft Hololens (lentes holográficos) para ofrecer representaciones en tres dimensiones de las creaciones que los usuarios quieran ver. De hecho, SketchUp desarrolla una tecnología que permite interactuar con los hologramas, al mejor estilo de Tony Stark en las películas de Marvel.
Estos dispositivos revolucionan la profesión de arquitecto, pues simplifican tareas que antes exigían mucho tiempo y esfuerzo. El resultado es que los arquitectos pueden concentrarse en los aspectos creativos o técnicos más relevantes. Hoy son herramientas que parecen futuristas, pero es probable que en pocos años sean equipos de arquitectura sin los cuales será imposible trabajar. El mañana ya llegó para los arquitectos con estos increíbles gadgets.