El mundo que nos espera después de que pase la covid-19 no se parecerá en nada al que dejamos antes del confinamiento. Como en muchos otros ámbitos, los cambios se verán en los espacios de trabajo, que se adaptarán a la nueva realidad impuesta por el distanciamiento físico.
“Nueva realidad. ¡Así será la próxima temporada!”. Este texto acompañó la viral imagen publicada en Instagram por la compañía de teatro Berliner Ensemble. En la imagen se mostraban los cambios de su sala para responder a las exigencias del distanciamiento físico de la era del covid-19. La sala, con una capacidad para 700 personas, ahora permitirá el acceso a solo 200, debido a la desinstalación de 500 de sus butacas y a la disposición de sus asientos con dos metros de separación.
Este es un ejemplo de que el mundo que conocíamos antes de la pandemia no será el mismo que nos recibirá cuando regresemos. Instituciones educativas, centros deportivos, salas de cine y teatro, espacios de trabajo, medios de transporte, restaurantes y prácticamente todos los espacios actualmente se reinventan para adaptarlos al distanciamiento físico.
Créditos: Teatro Berliner Ensemble
Diseño de asientos para viajar en avión
Las aerolíneas son una de las industrias más afectadas por la covid-19. De allí que hayan surgido propuestas como la de la compañía Aviointeriors, de asientos que cumplen los requerimientos de distanciamiento físico entre los pasajeros.
El diseño propuesto por la compañía italiana consiste en filas de tres asientos, en las que el pasajero que se sienta en el medio está en dirección opuesta a sus compañeros de ambos lados. Esto previene el contacto físico aun cuando los pasajeros están sentados uno al lado del otro. La propuesta incluye burbujas plásticas que cubren las cabezas de los pasajeros para evitar el contagio al respirar. Este tipo de escudos plásticos también se desarrollan en otras industrias; en los restaurantes, por ejemplo, se han inventado unas especies de lámparas transparentes que protegen la cara de las personas mientras están sentados a la mesa.
Cero contacto físico
“Con el 80% de las enfermedades infecciosas transmitidas al tocar superficies contaminadas, el futuro estará lleno de acciones manos libres”, sentenció Arjun Kaicker, reconocido arquitecto y fundador de Zaha Hadid Architects. “Creo que de aquí en adelante veremos empresas con pasillos y puertas más anchas y más divisiones entre departamentos”, comentó.
En una entrevista para el periódico The Guardian, Kaicker explicó que su compañía trabaja en el diseño de un edificio con “vías sin contacto” para una compañía en los Emiratos Árabes Unidos. Para el experto es fundamental crear espacios de trabajo en los que las personas cada vez estén menos obligadas a tener contacto físico con superficies. Ascensores que se llaman con el teléfono inteligente o puertas de oficinas que se abren automáticamente, gracias a sensores de movimiento y reconocimiento facial, serán cada vez más comunes en el mundo que nos espera.
Cenas íntimas y experiencias gastronómicas en tiempos de coronavirus
Una de las actividades que más extrañamos es comer en nuestro restaurante favorito. Por ello, los arquitectos y diseñadores de Mediamatic ETEN y Serres Séparées han creado una solución para ayudar a los restaurantes a reinventarse y salir a flote.
La propuesta, puesta en práctica en Amsterdam; consiste en cubículos transparentes ubicados alrededor de los famosos canales de los Países Bajos. Estos “cuartos separados” están recomendados para familias, parejas o personas que vivan juntos y deseen tener una experiencia gastronómica mientras mantienen la distancia con otras personas.
Otra propuesta es la de la empresa estadounidense Mass Design Group, que publicó una guía especialmente dedicada a ayudar a los restaurantes a abrir con la seguridad que se amerita. La guía ofrece consejos sobre seguridad en el espacio público y preparación de alimentos. Entre las recomendaciones básicas se encuentran:
- Garantizar la ventilación de los espacios.
- Poner por escrito los nuevos protocolos, como pruebas de temperatura, estaciones de lavado de manos, pedidos y procesamiento, y distanciamiento físico.
- Señalizar claramente los espacios (con, por ejemplo, marcas en pisos y paredes) para ordenar el flujo de las personas.
Parques y plazas públicas pensadas para el distanciamiento
En Italia, los diseñadores de espacios no se han quedado atrás y han trabajado para darle a los espacios públicos un nuevo concepto. En la Piazza Giotto, en Vicchio, Toscana, por ejemplo, los arquitectos del estudio italiano Caret Studio crearon StoDistante.
Se trata de un patrón dibujado en el suelo que señala, por medio de cuadrados de diferentes tamaños, la distancia apropiada que las personas deben mantener. Con su propuesta los arquitectos italianos quieren invitar a las personas a “reclamar y reactivar” los espacios abiertos mientras se respetan las normas de distanciamiento. El estudio arquitectónico trabaja también en un proyecto similar que puede usarse en espacios como gimnasios, iglesias y colegios.
En Viena, el Studio Precht presentó el “Parque de la Distancia” como propuesta para la ciudad. Se trata de un parque con un laberinto natural en el que los caminantes pueden hacer recorridos de 600 metros. El parque tiene una entrada y una salida; de esa forma se garantiza que solo haya una sola persona a la vez.
Como vimos, volver a la normalidad requiere algunos cambios. El principal es “más espacio”, con diseños más personalizados y menos colectivos. Seguramente, a medida que la pandemia se desarrolla, aparecerán propuestas e innovaciones en el mundo del diseño y la arquitectura para la nueva vida que tendremos.